En mi afán por darle sentido a los pumses, esas cosas que estuve practicando durante muchos años sin rechistar simplemente porque nunca me dijeron que sus movimientos tuvieran más sentido que el de bloqueos y ataques percutantes, sin agarres ni nada, aquí os presento otra edición de "los secretos del taekwondo" desde el dojo de Colmenar Viejo.
Visto que tanto para el karate como el kung fu las formas tienen un sentido (aunque por supuesto muchos de sus practicantes no lo sepan), ya que codifican técnicas de lucha cuerpo a cuerpo, tenía que estudiar si los pumses eran una mala copia de los katas del karate, sin sentido alguno, o por el contrario, se podrían utilizar para ensayar rutinas de defensa personal.
Según dice mi colega Marc, veterano aikidoka que también hizo sus pinitos en el taekwondo y que tiene un libro llamado “La enciclopedia del taekwondo”, del considerado fundador Choi Hong Hi (1918-2002) (¿fundador? ¿pero no es un arte milenario? no me aclaro, troncos), en dicho libro hay una pequeña sección de defensa personal al final.
Todas las técnicas que aparecen en esa sección son ikios, nikios, sankios, barridos y proyecciones, etc. todo aikido, me decía Marc. Es decir, mucho puño y patada a lo largo del libro y luego a la hora de la defensa personal nos encontramos con técnicas de control y luxación.
Gracias a las locas ideas de mi amigo Daniel, afortunadamente defenestrado por su sensei, he podido profundizar en este aspecto del entrenamiento de las artes marciales. Él no para de compartir conmigo interpretaciones que descubre cada dos por tres gracias a youtube y lo que nos ve hacer a los aikidokas y a los practicantes de jiu jitsu.
¡Chicos, llamadme loco, pero os estoy descubriendo “los secretos del taekwondo”!
Por otra parte, he de señalar que los pumses ciertamente guardan secretos, ya que sus movimientos son mucho más rígidos que los de los katas y éstos a su vez más rígidas que los de las formas del kung fu, de modo que los practicantes de taekwondo parecen robocop cuando hacen pumse, (vale, lo asumo) y en consecuencia, y por eso se convierten en secretos, es más difícil interpretar qué se buscaba representar en cada secuencia de movimientos.
No obstante, al limitar los movimientos y ser éstos tan lineales, se abre más el rango de interpretaciones, lo que hace que ante una secuencia de un par de técnicas tengamos la posibilidad de deducir 5 o más interpretaciones. Ello dependerá de los conocimientos de grappling y kyusho que tenga el intérprete.
Es decir, estoy seguro de que alguien que no sepa nada de grappling no podrá interpretar en la mayoría de las ocasiones más allá del mero bloqueo y golpeo, con las consecuencias que ello implica.
Un análisis posible del pumse taeguk chil chang
Comenzamos primero con una pequeña demostración del inicio del 7º pumse, taeguk chil chang tal y como se ha practicado toda la vida.
Comenzamos a desarrollar estos tres movimientos y tratamos de averiguar en qué pensaban las personas que practicaban artes marciales orientales hace miles de años o directamente Choi Hong Hi hace unas cuantas décadas.
Nuestro uke nos ataca con un puño frontal, un agarre, un empujón…
En primer lugar hacemos un parry con la izquierda y agarramos su muñeca. El batangson de la derecha va al triceps buscando un control de codo (ude osae).
Con el uke controlado atacamos con nuestra rodilla en sus costillas. Podría ser suficiente para terminar la confrontación.
No obstante, como parte del ejercicio (y porque de todo podría ocurrir en una pelea) dejamos que uke se recupere y continúe atacando con el brazo que tiene libre.
Hacemos un parry con la derecha y agarramos su muñeca.
Hacemos un montong maki procurando incidir con nuestra muñeca en el punto triple calentador número 11 (Triple Warmer o triple burner 11), un típico punto de fricción.
Sometemos a uke nuevamente y le atacamos con una nueva rodilla en el otro costado.
Ahora al bajar la pierna y sin dejar de presionar el TW11 por encima del codo, le pisamos intentando golpear en el punto estómago 43 (st 43), en el empeine de su pie derecho.
Como ya saben los practicantes de kyusho, la combinación de dos puntos como TW11 y st 43 multiplicará los efectos de la aplicación.
Otra secuencia:
Empezamos este ejercicio con uke cogiédonos las 2 muñecas (ryote dori). A tal efecto dejamos las manos abiertas para debilitar su agarre
Con nuestra derecha presionamos en su punto pulmón 5 del brazo derecho, haciéndole inclinarse.
Inevitablemente nos acabará soltando, de modo que pasando nuestro brazo derecho por debajo de su derecho le “ponemos una bufanda” y le hacemos un irimi nage.
Una vez en el suelo rematamos con un golpe en el punto estómago 7…
…Y/o realizamos un kubi kansetsu:
Bo chumok chumbi… ese movimiento “de concentración”…
Se puede interpretar como una guillotina
Ese gawi maki, puede no ser un bloqueo doble…
…sino… MAGIA: Un ude garami funciona casi igual. Loren W. Christensen hace así la aproximación en su libro Defensive tactics para los policías.
Continuamos con el pumse:
Típico, nos agarran de las solapas de la chaqueta:
Reducimos la tensión del agarre golpeando en ambos puntos pulmón 5 con el bakat palmok gechio montong bakat maki.
Le cogemos de los hombros:
Ataque de rodilla para que agache:
OPCIÓN A: Paso atrás
hacemos un double leg takedown
Nos posicionamos fuera de su guardia
Interpretación I del bloqueo en X: estrangulación juji jime
Interpretación II del bloqueo en X: Double wrist lock (gyaku ude garami)
Interpretación III del bloqueo en X: Top wrist lock (ude garami)
OPCIÓN B: proyección con double overhooks:
Control en el suelo: si uke intenta levantarse se estrangula a sí mismo, o también le podemos disuadir tensando un poco más su brazo derecho con presión en el triple calentador 11
Otra secuencia, ya acabando el pumse:
el uke nos agarra:
le metemos un tradicional atemi
la patada hacia adentro se reconvierte en un rodillazo que le obligue a uke a agacharse
preparamos un barrido con la pierna que atacó con la rodilla
en el suelo, una vez derribado, le controlamos
kubi kansetsu, golpeo o cualquier otro control
El final del pumse:
ryote dori, uke me agarra las dos muñecas
Retrocedo para ganar distancia y me libero del agarre con el jansonnal montong bakat maki
le sujeto para tenerle controlado
me aproximo a él por su espalda, anticipándole lo que le espera con un cariñoso atemi
al girar las caderas le derribaré (sokumen irimi nage – kokyu ho)
Control en el suelo. Mi mano derecha presiona en el punto triple calentador 17
Agradezco la colaboración de mis compañeros Daniel y Víctor, ávidos practicantes de artes marciales, en la elaboración de este reportaje. Nos divertimos y descubrimos cosas nuevas.
El lugar: el budokan de Colmenar Viejo.